¿CÓMO ELEGIR UNA PISTOLA DE PINTURA?
Si estás leyendo esto estoy casi seguro de que habrás pintado alguna vez con rodillo o brocha, eso está muy bien, pero te va a dar poca experiencia en la pintura con pistola.
Como buena noticia, te comentaré que pintar con pistola, si sigues unos pequeños consejos, es más rápido y divertido.
Utilizar la pistola para pintar es la solución que buscas: rápida, permite ahorrar pintura, menos tiempo y esfuerzo, sobre cualquier superficie y, además, divertido.
Pero, al igual que para Rafa Nadal su raqueta es su herramienta de trabajo, tanto si eres pintor profesional como aficionado, las pistolas de pintura son el recurso que vas a utilizar para presumir después ante clientes o amigos. Es por esto por lo que tienes que tener claro qué pistola necesitas, aunque las pistolas te recomiendo en pistola-de-pintura.com son todas de calidad y, a no ser que quieras hacer algo especial, podrás usarlas sin problemas para tus proyectos.
Comprar pistola para pintura ¿Qué pistola comprar?
Antes de que te lances a comprar una pistola de pintura, ten en cuenta alguna cosa y seguro que no te equivocas.
Lo más importante es el tipo de producto que vas a aplicar y la superficie donde vas a hacerlo. Vamos, que pienses en para qué la quieres. Piensa un poco a futuro porque a lo mejor hoy sólo quieres pintar una pared, pero mañana puedes necesitar pintar la fachada, los radiadores o la carrocería de tu coche a terceros… Espero que esto último no tengas que hacerlo y si lo haces, que sea barato.
En función del tipo de producto que vayas a aplicar tendrás dos tipos de pistolas, la capaz de aplicar lacas y barnices o las que pulverizan pintura. No te preocupes mucho porque muchas de las pistolas para pintar pueden hacerlo prácticamente todo.
Si tienes en cuenta la superficie que vas a pintar, será interesante que elijas tu pistola con un depósito con suficiente capacidad para no tener que parar cada poco tiempo y realizar el trabajo de una vez o que puedas ir terminando cada una de las partes de forma completa, es decir, si vas a pintar una habitación, que puedas terminar cada pared de una vez. Esto te facilitará el trabajo.
Hay varios tipos de pistolas y se pueden clasificar de varias formas dependiendo del criterio que elijamos. Como aproximación, diré que existen tres tipos de pistola. La pistola de compresión o turbina, que es la que lleva el motor separado de lo que es la pistola en sí. La pistola sin aire, que pesa un poco más y lleva el motor integrado y la de absorción directa, que toma la pintura o el barniz del cubo de pintura directamente.
Cada una de ellas tiene unas características concretas que las hacen más adecuadas para determinados trabajos.
A la hora de elegir, la capacidad del depósito, el peso de la herramienta y la longitud de la manguera son algunos factores a tener en cuenta cuando decides comprar una pistola de pintar.
Eso por un lado, pero por otro lado, según el uso que vayas a darle a la pistola, la potencia y presión de la máquina, que determinará la rapidez de aplicación y el tipo de producto que puedes aplicar, también jugarán un papel importante.
Por último, el diámetro de la boquilla o la posibilidad de cambiarla y los accesorios que lleve la máquina nos permitirán, ampliando el abanico de pulverización, aumentar la velocidad de trabajo.
Todos estos factores son los que tendrás que valorar a la hora de adquirir una pistola para pintar.
Cuando vayas a elegir una pistola de pintar, yo te recomiendo que busques una con compresor. Es mejor gastar un poco más y tener una buena máquina que andar siempre al límite y realizar trabajos que o bien nos va a costar mucho trabajo terminar, o bien no van a quedar todo lo bien que nos gustaría.
Si tienes una pistola con compresor, podrás utilizarla, además de para pintar, para lacar o barnizar. Cada uno de estos trabajos requerirá una boquilla diferente para la pistola, lo que nos permitirá utilizar pinturas y barnices de mayor o menor densidad, utilizando la boquella adecuada para cada tarea.
Como hemos comentado, hay que prestar atención también a la manguera que une el compresor con la pistola. Puede parecer un detalle menor pero tener una manguera corta nos hará tener que andar moviendo el compresor todo el tiempo, lo que, te aseguro, es un poco rollo.
Las pistolas, generalmente, pueden trabajar con cualquier tipo de pintura aunque yo te recomiendo no utilizar pinturas “especiales”, como las que tiene brillantina, a no ser que quieras que se atasque la boquilla o que tengas que limpiarla después del uso de una forma intensiva si no quieres que el resto de trabajos brillen como Campanilla.
Si vas a utilizar la pistola para pintar pequeñas piezas, como las de una moto, busca una pistola que se llama popularmente “de retoque”. Estas pistolas son más pequeñas, gastan menos aire y, por lo tanto, menos pintura y, al ser más ligeras, son más manejables.
Puedes utilizar cualquier pistola con un mínimo de calidad para pintar, pero te aconsejo intentar gastarte un poco más si quieres que los resultados sean óptimos. Tus proyectos te lo agradecerán.
Con todos estos datos, creo que ya estás preparado para elegir la pistola adecuada a tus necesidades.